En Tarah hemos ido perfeccionando nuestro proceso de reclutamiento a través de la experiencia y la evolución del mercado. Este enfoque nos ha llevado a conocer las mejores prácticas que deben tener en cuenta las empresas.

Identidad clara: Conocer la cultura organizacional de tu empresa, incluyendo su misión, valores y cualidades únicas, sienta las bases para atraer, desarrollar y retener al talento adecuado.

Proceso de contratación estandarizado: La consistencia es clave para una contratación efectiva. En Tarah utilizamos un sistema de seguimiento de candidatos para establecer un flujo de trabajo, reduciendo el sesgo y proporcionando una buena experiencia.

Buena experiencia del candidato: Es primordial que el candidato considere el proceso como algo positivo y no estresante. Nosotros ayudamos a simplificar el proceso de solicitud, mantenemos una comunicación transparente y nos aseguramos de que el candidato se sienta valorado, incluso si no es seleccionado.

Calidad sobre la cantidad: Si bien tener muchas solicitudes puede parecer prometedor, es mejor adaptar las descripciones de trabajo para atraer a candidatos que si se alineen con las necesidades y valores de la empresa.

Búsqueda continua: Construir un canal de talento requiere esfuerzo continuo, nuestro equipo se mantiene conectado con candidatos potenciales, incluso si no son necesarios en el momento, así tu empresa puede tener opciones cuando sea necesario.

Potencial de crecimiento: Es recomendable ver más allá de la experiencia y buscar candidatos que además demuestren la capacidad de crecer con tu empresa. Personas que exhiban rasgos clave como adaptabilidad, ambición y disposición para aprender pueden ser muy valiosas.

Principios de ventas: Aplicar los principios de ventas es muy importante, desde presentar vacantes convincentes hasta calificar prospectos y negociar ofertas.

Si te interesa aplicar estos principios en tu organización, contáctanos para obtener más información sobre cómo podemos trabajar en conjunto.